domingo, 24 de enero de 2016

LA TELEVISIÓN

La televisión es un poderoso medio de entretenimiento y socializador, tanto que en muchas ocasiones llega a reemplazar a la familia como agente trasmisor de afectos y modelos.
La televisión tiene unas características que la hacen única:
Los estímulos se suceden rápidamente captando repetidamente la atención de los pequeños.
Es un estímulo multisensorial, estimula el oído y la vista.
Utiliza técnicas para emitir mensajes seductores que influyen en la conducta y actitud de los espectadores y pone en marcha determinados sistemas neuronales llamados de "gratificación cerebral".
Conecta con frecuencia con intereses personales básicos como: la curiosidad, exploración, experimentación de emociones, etc.
Que un niño esté quieto viendo la t.v puede suponer una comodidad para familias y cuidadores. Además, mirarla no supone esfuerzo alguno y favorece la pasividad intelectual.
Las propiedades o características de la televisión no la hacen buena o mala por si misma. Todo depende, como siempre del uso que se haga de ella. Bien utilizada puede contribuir a la educación y entretenimiento como instrumento favorecedor de la cultura, el ocio, etc.

Pero, si no se utiliza correctamente, o se abusa de ella, son muchos los efectos nocivos que pueden aparecer en la relación con los niños, algunos de ellos los siguientes:
Fomenta la incomunicación, ya que el mensaje que emite es unidireccional, del aparato al niño.
Fomenta el sedentarismo y cada vez existe más evidencia de la relación directa entre el consumo de t.v y  obesidad.
La publicidad emitida tiene como objeto estimular el deseo y la necesidad de consumir.
La visualización por parte del niño de escenas violentas repercute sobre su agresividad.
Cuantas más horas vea un niño la t.v y a menor edad comience, más riesgos de provocar en el niño efectos nocivos.
Las familias tienen la responsabilidad de dar ejemplo sobre cómo usar la t.v, alguna de las cosas que se podrían hacer son, por ejemplo:
No tenerla encendida todo el día, escoger programas de forma racional, controlar el tiempo dedicado a verla y no usarla como canguro (no debe haber t.v en el cuarto de los niños).
ORIENTACIONES PARA EDUCAR EN SU USO
Dedicar tiempo a otras actividades compartidas como leer, jugar, etc
Influir para que nuestros hijos encuentren, por sí mismos, otros modos de distraerse.
Acostumbrar a los niños a pedir permiso para encender la t.v.
Evitar programas con contenidos no adecuados (violentos, sexuales o la llamada telebasura).
Asegurarse que las horas de t.v no quiten sueño diurno, ni nocturno.
Aprovecharla como una actividad compartida que pueda dar pie a juegos, canciones, explicaciones, etc.
Ante una escena violenta el adulto debe expresar su desacuerdo  y mostrar al niño alternativas.
Utilizarla puntualmente como objeto de estímulo
Apagarla durante las comidas.
Para terminar, deciros que la UNESCO lleva tiempo alertando de que en los países desarrollados los mayores consumidores de t.v son los niños, con sus consecuentes efectos negativos y que, por otro lado, la Academia Americana de Pediatría recomienda que los menores de 2 años no vean la t.v y los mayores que no lo hagan más de dos horas diarias.
Un saludo a todos/as.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por participar en esta página