jueves, 29 de octubre de 2015

CARACTERÍSTICAS EVOLUTIVAS DE LOS 6 A LOS 12 AÑOS

En el intervalo de edad de los 6 a los 12 años podemos distinguir dos momentos evolutivos muy diferenciados:
De los 6 a los 9: es una etapa de cambios continuos, a esta edad comienzan a comprender de forma definitiva que los pensamientos y sentimientos de los otros son distintos a los suyos y que no son el centro del universo. En este momento, los padres son todavía, casi de forma exclusiva, el único referente emocional.
De los 9 a los 12 años: los niños aprenden conocimientos sobre sí mismos que permanecerán con ellos casi toda la vida: como el sentido de la propia eficacia, la pertenencia al grupo, la responsabilidad y el concepto de sí mismos.
Sentido de la eficacia: lo desarrollan a medida que se enfrentan a nuevas tareas y responsabilidades. Por este motivo, las familias tenemos la misión fundamental de educar en la perseverancia y el valor del esfuerzo (dando valor real al esfuerzo y no sólo al resultado). Esta exigencia debe ir acompañada de afecto y reconocimiento de los éxitos (es muy importante que los niños tengan experiencias variadas de éxito). Tanto el exceso de exigencia como el de sobreprotección causan el efecto de inseguridad y baja autoestima.

domingo, 25 de octubre de 2015

CÓMO HABLAR A LOS NIÑOS DEL CÁNCER

El 19 de octubre ha sido el Día Mundial de la lucha contra el cáncer de mama.
 
Desde este blog me sumo a ella intentando poner mi granito de arena, haciendo lo qué sé hacer, hablando sobre los niños.
 
Y es que cuándo alguien que tiene niños pequeños, o no tan pequeños, se enfrenta a un diagnostico de cáncer, entre sus muchas preocupaciones, a menudo, se encuentra también la de cómo decírselo a sus hijos.
 
Mi opinión personal es que los padres no deben ocultar esta situación a los niños, entre otras cosas, porque es imposible mantener un cáncer en secreto. Los niños escuchan conversaciones (incluso cuando parecen que no están escuchando) y también notan las preocupaciones de los padres, siendo capaces de percibir cuando algo no va bien.
 
Si ellos piensan que se les está ocultando algo tenderán a atemorizarse y a ponerse en lo peor.
Si  se enteran por otra persona, al miedo se sumará la desconfianza.
Además, el esfuerzo que conlleva mantener algo así en secreto puede no ser recomendable para la persona que está enferma.
 
No saber lo que está pasando puede ser una experiencia muy angustiosa para el niño, por lo que es necesario hablar con ellos sobre la enfermedad y anticiparles los efectos secundarios que el tratamiento podría causar.

domingo, 18 de octubre de 2015

EL NIÑO QUE NO COME

Aprovechando que el 16 de octubre ha sido el Día Mundial de la Alimentación he querido dedicar esta semana a explicar uno de estos casos que tanto preocupan a las familias "cuando el niño no come".

Y una vez más volvemos a hablar de hábitos: Comer bien es un hábito que se aprende.
Cuando un niño deja de comer puede estar reflejando ciertas dificultades para adaptarse a su vida cotidiana. (Hay que estar atentos al estado emocional).
No comer puede ser un argumento importante para llamar la atención del adulto y tener un rato de protagonismo.

Muchos niños pasan por etapas de inapetencia alguna vez y la mayoría de las veces se resuelve de manera espontánea. A los adultos (especialmente a las madres) les suele producir mucha angustia ver que su hijo no come. Temen no poder cubrir la primera de las necesidades básicas: estar alimentado.

Un niño sano que dispone de comidas regulares y variadas, aunque coma muy poquito, es muy difícil que esté mal alimentado (ante la duda consultar al pediatra). Sin embargo, es habitual en los niños que comen mal que se den problemas de obesidad por hábitos mal adquiridos.

sábado, 10 de octubre de 2015

CARACTERÍSTICAS EVOLUTIVAS DE LOS 3 A LOS 6 AÑOS.

Como os comentaba en el post anterior creo que es importante que los familias conozcáis las características  evolutivas de las diferentes etapas que se suceden en el desarrollo infantil, puesto que así sabréis qué sucede en cada momento y podréis atender mejor las necesidades de vuestros hijos ofreciéndoles pautas y estímulos adecuados.

Lo que un niño es capaz de hacer en un determinado momento depende de su maduración física, psicológica y emocional y de las posibilidades que le ha ofrecido el entorno en ese momento, es decir,  de sus circunstancias.

¿QUÉ PASA EN LA ETAPA DE LOS 3 A LOS 6 AÑOS?

El bebé crece de manera acelerada. Su capacidad para hacerse entender se multiplica. Su mundo empieza a ampliarse y sus intereses van en aumento. Va descubriendo nuevas habilidades y las va poniendo a prueba. Ha avanzado mucho, pero todavía le queda un largo camino por recorrer.

La curiosidad es su principal motivación. Es muy intensa y debemos aprovecharla para enseñarles a explorar con seguridad y a buscar respuestas. Están descubriendo el mundo y es la época de aprender a través del juego y la experimentación. Hay que dejarles que experimenten, que manipulen, que descubran y que jueguen. Así, poco a poco se irán adueñando del conocimiento experimentando el placer de hacerlo. Es decir:

domingo, 4 de octubre de 2015

NUEVA ORGANIZACIÓN CON LA LLEGADA DEL BEBÉ Y VÍNCULO DE APEGO SEGURO

Una vez que nace un hijo/a ya nada será igual, se estrenan sentimientos, cambian los roles familiares e invaden emociones fuertes y complejas (satisfacción por haber formado una familia y también miedos, preocupaciones e inseguridades). A su vez, se tiene que cuidar, atender e intentar entender al nuevo miembro de la familia.
La relación con el bebé comienza antes de su nacimiento: cuando pensamos, cantamos o le tocamos a través de la panza, cuando la madre cuida su salud y renuncia a ciertas conductas perjudiciales (fumar, beber, etc), cuando el padre apoya y se sabe integrar de esta experiencia, cuando se elige el nombre y se le hace un lugar en nuestra casa y en nuestras vidas.
El nacimiento enfrenta al sueño con la realidad: el hijo no siempre es como se había soñado. Puede ser parecido, pero casi seguro que no será igual. Sólo si se sabe dejar atrás la imagen del bebé soñado se podrá aceptar al real, sentirlo y establecer un buen vínculo con él  o ella.
 
¿Cómo se siente la madre? Después del parto suele estar exhausta pero eufórica de felicidad. Poco a poco estas emociones se van suavizando hasta lograr regularse.
En algunas madres la revolución hormonal facilita que se sientan tristes, preocupadas, abatidas o irritables en exceso. Casi todas lo superan en algunos días.
En algunas pocas, este estado es muy intenso y deriva en un cuadro depresivo que debe ser tratado. Signos de alarma: mucha tristeza, desgana, desesperanza, falta de energía y dificultad significativa de establecer relación con el bebé y desempeñar su cuidado. En este caso hay que consultar con el médico.